Introducción: La Biblia nos enseña que el gozo del
Señor es nuestra fuerza. Es normal que ante problemas de la vida, surja la
tristeza, y cuando nos quedamos allí, esto fácilmente conduce al estancamiento.
La tristeza no nos deja ver a Dios, ni sus grandes bendiciones, el corazón se opaca, y pierde fuerzas. Sin embargo siempre debemos tener presente la fidelidad de Dios quien ha prometido: “Estaré contigo en el día de la angustia”…
La tristeza no nos deja ver a Dios, ni sus grandes bendiciones, el corazón se opaca, y pierde fuerzas. Sin embargo siempre debemos tener presente la fidelidad de Dios quien ha prometido: “Estaré contigo en el día de la angustia”…